Hoy es Maha Shivaratri, festival que se celebra en honor a Shiva, una de las principales deidades del hinduismo, el destructor, el tranformador, el purificador, patrono de las artes escénicas, de la noche y de lo marginal.
La Gran Noche del Señor Shiva, conmemora el momento en el que Shiva, primer yogui, alcanza la iluminación y sumergido en el éxtasis divino se manifiesta como Nataraja, el bailarín cósmico.
La celebración nos invita a inspirarnos en Shiva y recordar el camino que nos lleva a la superación de la ignorancia, a soltar la ilusión, a saber que todo está en función de la ley de causa y efecto y que cada unx de nosotrxs tiene la capacidad de posarse por encima de esto y diluir las dualidades, los apegos, los preconceptos.
Otra de las leyendas relacionadas con esta festividad es la del casamiento de Shiva y Parvati que eligieron esta fecha especial para consumar su amor, uniendo Púrusha (la conciencia, Shiva, aquella que trasciende la vibración) con Prakriti (la matergia, Parvati, el campo vibratorio que permite que púrusha se manifieste),
La segunda dimensión, Purusha y Parakriti, ahora mira la imagen, allí atrás esta Krishna, la primera dimensión.
Inspiremonos en Parvati! que nuestra naturaleza material este comprometida amar, servir a «eso que no es» .